BLACKTHORN (SIN DESTINO).- Países: España, Francia y Bolivia. Año: 2011. Duración: 98 min. Dirección: Mateo Gil. Intérpretes: Sam Shepard, Eduardo Noriega, Stephen Rea, Magaly Solier, Nikolaj Coster-Waldau, Dominique McElligott. Producción: Andrés Santana, Ibon Cormenzana, Jêrome Vidal y Paolo Agazzi. Guión: Miguel Barros. Fotografía: J. A. Ruiz Anchía. Música: Lucio Godoy. Montaje: David Gallart. Dirección artística: Juan Pedro de Gaspar. Vetuario: Clara Bilbao. Distribuidora: Alta Classics. Género: Western. Estreno en España: 1 Julio 2011.
Pequeña decepción. Me esperaba más del reencuentro con el mítico personaje de Butch Cassidy casi 30 años después de que se le diera por muerto junto a su eterno amigo Sundance Kid. El tándem Gil-Barros, director y guionista, sitúan ahora a Cassidy en Bolivia y le obligan a vivir una historia de amistad con un estafador español, Eduardo Noriega, muy distinta a la que le marcó más allá de la muerte de Kid. El abuso de flash bascks de esa etapa resulta tan plano como innecesario. Y mientras Shepard enriquece la pantalla cada vez que aparece, Noriega la empobrece. Para colmo, como manido reclamo para no sé qué tipo de público, el español vuelve a enseñar el trasero en una secuencia innecesaria. A pesar de todo, la peli se ve con curiosidad y deja momentos aislados de buen cine.
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